Estudios Científicos relacionados a brotes de enfermedades virales, han demostrado que protegiendo a los trabajadores de la Salud y evitando que pacientes enfermos diseminen la enfermedad, se reducen las posibilidad de infección con enfermedades como por ejemplo, el coronavirus (COVID-19)
De acuerdo a esto, la OMS recomienda el uso de mascarillas faciales a:
1.- Las personas que tienen síntomas respiratorios como tos, estornudos o dificultad para respirar, incluso cuando buscan atención médica, para proteger a los que están a su alrededor.
2.- Las personas (incluidos los familiares) que brindan atención a personas con síntomas respiratorios.
3.- Trabajadores de la salud, cuando ingresan a una habitación con pacientes o cuando tratan a un individuo con síntomas respiratorios, y de acuerdo con el tipo de atención que se brindará.
En ninguna de estas circunstancias, el solo uso de una máscara facial no garantiza la detención de infecciones y debe combinarse con otras medidas de protección personal, como la higiene de las manos, mantener la distancia de las personas con síntomas, y mantener la higiene respiratoria (o etiqueta para la tos).
Fuente: OPS/OMS
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