En los 7 días recientes, el 83% de los casos comunitarios secuenciados fue causado por la primera. Expertos destacan que ahora que estas mutaciones de mayor transmisibilidad lideran los nuevos contagios, es fundamental mantener las medidas de prevención para evitar una nueva ola de covid-19.

En febrero de este año, los exámenes de secuenciamiento genómico del coronavirus en Chile comenzaron a detectar la variante Gamma, de origen brasileño. Desde entonces, la mutación comenzó a circular rápidamente por el territorio nacional y, ya a mediados de abril, en aproximadamente siete semanas, era la de mayor presencia, desplazando a las ya existentes y generando la segunda ola de contagios, que hasta la fecha ha sido la más grande, con más de 9 mil contagios en una sola jornada y que puso al sistema de salud al borde del colapso.
Sin embargo, luego de casi ocho meses liderando las infecciones en el país, la irrupción de Delta ha cambiado rápidamente el panorama, porque no solamente tardó seis semanas en transformarse en la de mayor circulación, sino que desde la última semana simplemente eliminó del mapa a Gamma.
Según cifras del Instituto de Salud Pública, Delta representa el 83% de los contagios comunitarios, una proporción nunca alcanzada antes por alguna variante, mientras que el 17% restante son casos de Mu, la mutación de raíz colombiana, siendo las únicas dos que circulan en Chile actualmente.
Ahora que Delta ha ganado la batalla de las variantes de manera categórica, solo queda esperar qué tan grande pueda ser el rebrote de contagios, del cual ya se están viendo los primeros indicios con un incipiente aumento de contagios.
Sebastián Solar, infectólogo de la Clínica Alemana, afirma que ‘el marcado aumento porcentual de variante Delta refleja su mayor transmisibilidad; por lo tanto, lo que hoy vemos en Chile confirma lo que ya conocemos de otros países: ante circulación comunitaria de Delta, prontamente esta variante se convierte en la predominante’.
Agrega que ‘esto significa que a partir de los casos confirmados y sus contactos podríamos ver un alza de casos, dada la alta transmisibilidad de esta variante. Como la cobertura de vacunación en Chile es extensa, esperamos y deseamos que esto pueda mitigar el número de pacientes graves y la mortalidad’.
En tanto, Jeannette Dabanch, presidenta del Comité Asesor en Vacunas y Estrategias de Inmunización (Cavei), asegura que ‘lo que más preocupa es lo que hemos visto durante el fin de semana, una vez que se levantaron algunas restricciones, como el toque de queda, con el aumento de presencia de personas en lugares cerrados y muchas de ellas incluso sin mascarillas. Entonces, con una variante como la que tenemos presente en el país con una distribución comunitaria, la posibilidad de generar brotes como ya se han descrito en algunos centros cerrados como cárceles y hospitales, es preocupante’.
Añade que ‘es muy necesario enfrentar esta variante que ha demostrado ser altamente transmisible, capaz de producir enfermedades graves en no vacunados o con esquema incompleto, y que también es capaz de producir enfermedad en personas vacunadas. De ahí la importancia de mantener todas las medidas de autocuidado’.
Inmunización
Sin embargo, mientras Delta sigue aumentando su presencia en el país y generando un incremento en los contagios, uno de los puntos que comienza a tener relevancia nuevamente en el debate nacional es si los millones de personas que han sido vacunadas con Pfizer, incluido el personal de salud hace más de 10 meses, deberían recibir también una dosis de refuerzo.
Carlos Pérez, infectólogo de Clínica Universidad de los Andes y decano de Medicina y Ciencia de la U. San Sebastián, indica que ‘lo esperable es que Delta llegue a ser la variante predominante en nuestro país, al igual como ha ocurrido en todos los otros países que tienen esta variante, porque es la más transmisible y puede ser adquirida por personas ya vacunadas o que hayan tenido un episodio previo de covid-19’.
Con todo, Pérez argumenta que ‘lo que se está haciendo es lo que corresponde: ir avanzando en el refuerzo para personas que recibieron CoronaVac, que va perdiendo sus trazas de anticuerpos en el tiempo. Pero a continuación debería claramente considerarse refuerzo también para quienes recibieron vacunas Pfizer’.
Fuente/ www.clinicasdechile.cl
Comentarios