Proyectan que durante la próxima semana se podría llegar al medio millar de casos. Expertos advierten que si bien este linaje pareciera ser menos severo, puede llegar a ser más mortal que otras mutaciones si los contagios aumentan explosivamente en el país.
Las noticias que llegan desde gran parte del hemisferio norte no son alentadoras. Allí, Estados Unidos o Reino Unido ya sufren los embates de la variante Ómicron, que ha vuelto a elevar las infecciones por coronavirus a niveles que desde hace meses no se registraban. De hecho, la Organización Mundial de la Salud advirtió que se viene una ‘tormenta de contagios’ en Europa a raíz de este nuevo linaje.
En Chile, mientras tanto, la situación aún está muy alejada de los peores momentos cursados. Sin embargo, el sistema ya comienza a registrar las primeras señales que podrían ser de preocupación.
Hasta hace algunas semanas, la variante de covid-19 que había tenido un aumento de contagios más acelerado había sido Delta, que hasta antes de Ómicron asomaba como la mutación más transmisible. Pero debido al alto nivel de vacunación con el que cuenta Chile, tras la llegada de Delta, si bien rápidamente se transformó en la de mayor circulación, no generó un incremento de positivos tan violento como las dos olas previas.
Con la llegada de Ómicron, Delta perdió rápidamente el puesto de la variante con el crecimiento más veloz, porque ya se han detectado más de 130 casos en menos de tres semanas y si se considera el total de muestras secuenciadas genéticamente, Ómicron ya representa más del 15% del total Nacional en la última semana disponible (ver infografía).
Luis Miguel Noriega, jefe del Departamento de Medicina Interna de la Clínica Alemana, asegura que ‘es una realidad esperable: en otros países se ha visto que el aumento es explosivo y la razón es que la variante del virus tiene capacidades de realización más rápidas que las que teníamos previamente y va ocupando el nicho, versus las que tienen menos capacidad de realización’.
Y el crecimiento de Ómicron podría ser incluso mayor del que se tiene conocimiento. Al respecto, el especialista señala que ‘cuando se detecta una cierta cantidad de casos, probablemente hay muchos más circulando, eso es lo que uno asume. Son más de 130 que se han identificado, pero eso no significa que no haya ninguno más, porque es una vigilancia, no se detecta la totalidad de los contagios’.
Jeannette Dabanch, infectóloga del Hospital Clínico de la Universidad de Chile y miembro del Comité Asesor en Vacunas y Estrategias de Inmunización (Cavei), afirma que ‘Delta fue detectada en junio de 2020 y le tomó varios meses desplazar a las otras variantes. En cambio, a Ómicron le ha tomado tres, cuatro semanas en los países que ingresa. Es decir, tiene una capacidad de transmisión tremenda’.
Aunque Ómicron es sinónimo de más incógnitas que certezas, en general, los expertos han llegado al consenso de que este linaje es mucho más contagioso que todos los conocidos hasta ahora, aunque pareciera tener una menor severidad en los pacientes.
Sebastián Ugarte, jefe de la unidad de cuidados intensivos de la Clínica Indisa, sostiene que eso ‘podría darnos una falsa seguridad. El problema es que la necesidad de hospitalización disminuye aproximadamente en un 40%, según estudios internacionales, pero si los contagios aumentan en dos a tres veces respecto de la variante Delta, esa reducción en las hospitalizaciones no alcanza a compensar el aumento de casos’.
Agrega que ‘la cantidad de casos que tenemos, más o menos se duplica entre dos a tres días. Así, haciendo una proyección muy rápida, podríamos de acá a la próxima semana tener cerca de medio millar de casos de Ómicron, ya sea que los detectemos o no’.
Optimizar la detección Dabanch, por su parte, acota que ‘Ómicron puede ser menos severa, pero más mortal. En el fondo, se enferma tanta gente, que termina matando igual a muchas personas’.
Propone que para evitar un rebrote importante impulsado por esta mutación, hay que ‘optimizar al máximo la detección de casos, la trazabilidad y aumentar la detección de contactos por contagio, porque esta variante genera muchísimos contactos estrechos por caso, porque es mucho más transmisible. A todo esto, hay que sumar un incremento de la secuenciación genómica que ya se está haciendo’.
Fuente / www.clinicasdechile.cl
Comentários